El sistema digestivo es muy voluble: la mala nutrición, los medicamentos al azar y los malos hábitos alimenticios pueden hacer que el estómago y los intestinos actúen. Afortunadamente para ti, encontramos algunas formas simples y efectivas de mejorar la digestión.
1. Bebe agua en ayunas
Un vaso de agua regular con el estómago vacío ayudará a acelerar el metabolismo y preparará el tracto digestivo para la comida real. Preferentemente el agua debe estar templada oa temperatura ambiente, ya que el agua fría dificulta la digestión ya que el cuerpo gasta recursos en calentarla. También puede agregar un poco de jugo de limón al agua si desea que el ácido cítrico limpie su tracto digestivo.
2. Añade especias
Canela, clavo, jengibre, cúrcuma, cilantro, jengibre seco: todas estas y quizás más especias estimulan el apetito, mejoran la digestión, promueven la absorción de nutrientes y limpian el cuerpo de toxinas. Agréguelos a los platos con más frecuencia, especialmente a aquellos que son difíciles de digerir, como frijoles, carne, pollo, champiñones y alimentos grasos. Verás los resultados en tan solo unos días.
3. Coma menos alimentos crudos
Los productos crudos son difíciles y tardan más en digerirse, por lo que es mejor calentarlos, pero para conservar la máxima cantidad de cosas buenas como vitaminas y minerales, cocine al vapor su comida o cocínela en el horno con una cantidad mínima de grasa. .
4. Usa productos lácteos fermentados
El yogur, el requesón y el suero de leche te ayudarán a llenar los intestinos con lactobacterias y bifidobacterias útiles y mejorar la digestión. Son especialmente útiles para las personas que toman antibióticos porque los medicamentos alteran la microflora intestinal.
5. No te saltes el desayuno
El desayuno es la clave para un buen metabolismo a lo largo del día. ¿Y sabías que la comida se digiere mucho más rápido por la mañana? Todas esas calorías se convertirán en energía en lugar de acampar en los muslos y la cintura.
6. Come más fibra
Los carbohidratos juegan un papel vital en la limpieza del estómago y los intestinos, ya que las fibras dietéticas expulsan los desechos y las toxinas cuando pasan. Las mejores fuentes de fibra son las frutas, las verduras, los cereales integrales y las legumbres.
7. Come jengibre con el estómago vacío
Es muy bueno para la digestión comer jengibre antes de las comidas o, opcionalmente, puedes optar por un poco de té de jengibre. El jengibre mejora el apetito, estimula el peristaltismo, ayuda a quemar grasa más rápido y neutraliza las toxinas acumuladas en el estómago.
8. Bebe tés de hierbas
Para que los alimentos se digieran mejor, beba una taza de té de hinojo aromático o mastique las semillas después de una comida. El té de manzanilla también es increíble, ya que activa el intestino, reduce los efectos dolorosos de la gastritis y los cólicos y neutraliza el daño causado por los medicamentos.
9. No más bocadillos
Minimice el número de sesiones de merienda entre las comidas regulares. Verá, el tracto digestivo necesita tomarse las cosas con calma de vez en cuando, descansar un poco y recuperarse. Y si sientes el vil gorgoteo del hambre, come ciruelas pasas. Puede que no le guste la etapa final de estas frutas, pero mejoran la función intestinal y la oligofructosa previene el estreñimiento.
10. Mastica tu comida
Nunca apresure su comida ni coma sobre la marcha. Los pedazos de comida sin masticar fuerzan al sistema digestivo a trabajar en un modo intensificado, lo que puede causar la formación de gases, hinchazón y otros problemas. Trata siempre de comer en un ambiente tranquilo y cómodo y deja de mirar tu teléfono mientras comes.
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